Estudio busca obtener información actualizada sobre el Queule y su Hábitat

La investigación, liderada por la Iniciativa de Conservación de Especies Amenazadas, busca generar una nueva y actualizada evaluación sobre el estado de conservación de esta especie endémica de la zona centro-sur de Chile, declarada Monumento Nacional en 1995, cuya tala está prohibida.

 

Contar con información actualizada sobre el estado del Queule (Gomortega keule) y su hábitat, contribuyendo con antecedentes actualizados para su conservación es lo que entregará el estudio de prospección del Queule, que forma parte de las acciones propuestas por la Iniciativa de Conservación de Especie Amenazadas MMA/FAO/GEF y que está siendo ejecutado por el Laboratorio de Ecología de Paisaje y el Laboratorio de Epigenética Vegetal, dependientes de la Facultad de Ciencias Forestales de la Universidad de Concepción.

El estudio busca determinar en qué condición se encuentran la población de esta especie endémica, el estado de desarrollo de los árboles y el contexto en el que se encuentran, es decir, si están insertas en una matriz forestal, ganadera, agrícola, en terrenos muy erosionados o si se encuentran en un bosque nativo en buen estado de conservación. “Es importante contar con información de calidad y actualizada, ya que gracias a ella se podrán tomar las medidas necesarias y decidir sobre las acciones a realizar con el fin de disminuir las  amenazas que afectan al Queule y su hábitat”, indicó el Seremi del Medio Ambiente, Mario Delannays.

A su vez, la coordinadora de la Iniciativa en el Biobío, Fabiola Lara, señaló que para la iniciativa de Conservación de Especies Amenazadas MMA/FAO/GEF es fundamental contribuir a la sociedad con la   instalación de temáticas de conservación en todos los ámbitos, públicos y privados, siendo la academia parte de ello. “La ciencia tiene un rol fundamental aportando con investigaciones tendientes a diagnosticar y realizar propuestas que busquen la mejora del estado de la especie y el acuerdo de trabajo que estamos ejecutando con la Universidad de Concepción y su estudio de prospección, nos permite avanzar con datos actualizados, un despliegue en terreno que nos entrega argumentos para generar, de la mano de las comunidades, propuestas que ayuden a conservar el patrimonio natural que representa esta especie amenazada”, dijo Fabiola Lara.

“Como laboratorio tenemos información previa de varios años. Lo que estamos haciendo con este estudio es actualizarla”, comentó el investigador responsable de estudio, Cristian Echeverría, quien además señaló que en total llevan alrededor de 28 sitios prospectados entre las regiones del Maule, Ñuble y Biobío, rango de distribución de la especie. “Contamos con una ficha de prospección en la que describimos los atributos ecológicos de cada uno de los lugares visitados y esa información, que se ingresa a una base de datos georeferenciada, nos permite identificar cuáles y donde están  las principales amenazas que la especie tiene en el territorio, ya que no todas son iguales en los lugares donde habita el Queule”.

Los objetivos que buscan este estudio son proponer acciones de conservación a los propietarios de los terrenos donde están ubicadas las poblaciones de Queule y caracterizar genéticamente cada una de las subpoblaciones que se están estudiando, comprendiendo su riqueza y diversidad genética. “Generaremos una base de datos sistematizada y actualizada. La sistematización implica depurar la información que nos llega, luego debe ser validada y verificada por los profesionales que conocen la especie. El análisis previo es más complejo, sin embargo, llegaremos a obtener resultados más profundos y reales”, comentó Echeverría.

Hasta el momento, los investigadores del estudio se han encontrado con sitios muy degradados donde las poblaciones de Queule están insertas dentro de plantaciones forestales, por lo que las amenazas son evidentes. “El contexto social donde se encuentra la especie es muy diverso. Hemos encontrado distintos tipos de propietarios, y eso debe tenerse en cuenta al momento de proponer medidas de conservación”, agregó la coordinadora del estudio de prospección del LEP, Paula Gatica.

“Nuestro desafío es generar más conocimiento y formar a más personas que trabajen en el tema de conservación de especies amenazadas, continuando con el vínculo entre la ciencia, la sociedad y los tomadores de decisiones. Transferir conocimientos y entregar recomendaciones que ayuden a tomar mejores decisiones basadas en evidencias e información”, finalizó el investigador responsable de estudio.